Alberto Henschel (1827-1882)

Alberto Henschel, nacido en Berlín, el 13 de junio de 1827, fue un fotógrafo aleman-brasileño, considerado el más diligente empresario de la fotografía en Brasil del siglo XIX, con estudios en Pernambuco, Bahia, Rio de Janeiro y San Pablo. Henschel fue también responsable de la llegada de otros fotógrafos profesionales al país, como su compatriota Karl Ernest Papf, con quien trabajaría más tarde, y su hijo, Jorge Henrique Papf, que sucedería al padre en el ramo de la fotografía. Henschel fue conocido por producir bellas imágenes de Río de Janeiro como fotógrafo paisajista y por ser un excelente retratista, lo que le valio el título de Photographo da Casa Imperial, habilitándolo a retratar el cotidiano de la monarquía brasileña durante el Segundo Reinado, incluso fotografiando al emperador Don Pedro II y su familia. Este título valoraría mucho sus fotos, incluso en el precio. Pero, ciertamente, su principal aporte a la historia de la fotografía en Brasil fue el registro fotográfico de todos los estratos sociales del Brasil ochocentista, retratos, generalmente en carta de visita, fueron sacados de la nobleza, de los ricos comerciantes, de la clase media y de los negros, tanto libres como esclavos. Henschel desembarcó en Recife en mayo de 1866, junto con el también alemán Karl Heinrich Gutzlaff, con quien se asoció para crear un estudio fotográfico en la calle del Emperador. Inicialmente denominado Alberto Henschel & Cia, el estudio pasó a llamarse Photographia Allemã. Por el hecho de haber montado su negocio tan pronto como llegó a Brasil, se presume que Alberto ya era un experimentado fotógrafo y tenía intención de involucrarse en el negocio de la fotografía en un mercado todavía poco explorado. En 1867, Henschel se disoció de Gutzlaff y volvió a Alemania, donde actualizó su técnica y adquirió nuevos equipamientos para su taller de fotografía. Regresó a Brasil el mismo año, abriendo otro establecimiento con la misma razón social en la ciudad de Salvador. A finales de los años 1860, las casas de Recife y Salvador ya producían retratos de personas de origen africano, esclavas y libres, con la diferencia de retratarlas a voluntad y con dignidad, como individuos y no como objetos. Murio en Rio de Janeiro el 30 de Junio de 1882.