Dolores Martínez de Anda, más conocida como Lola Álvarez Bravo (1907-1993) fue una fotógrafa mexicana. Fue una figura clave, junto con Tina Modotti, Frida Kahlo, Diego Rivera y su esposo Manuel Álvarez Bravo en el renacimiento artístico post-revolucionario en México. Casada con Manuel Alvarez Bravo, de quien tomo el apellido, se divorcio en 1934. Inspirada por fotógrafos como Edward Weston y Tina Modotti, Lola emprendió una carrera independiente brillante. Fue la fotografa que mas retrato a Frida Kalho, hasta muerta, en su cama. Durante 50 años, fotografió una amplia variedad de temas, tomando imágenes documentales de la vida cotidiana en pueblos de México y las calles de las ciudades, así como retratos de grandes líderes de diferentes países. A mediados de los años 30, logró cierta estabilidad como fotógrafa de la revista El Maestro Rural, una publicación de la Secretaría de Educación Pública. Lola retrató la vida rural, recorriendo el país y con una mirada propia. Murió, en 1993, a los 90 años, ya reconocida como artista y como maestra de fotógrafas.